Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová. Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos. Porque como desciende de los cielos la lluvia y la nieve, y no vuelve allá, sino que riega la tierra, y la hace germinar y producir, y da semilla al que siembra, y pan al que come, así será mi palabra que sale de mi boca; no volverá a mí vacía, sino que hará lo que yo quiero, y será prosperada en aquello para que la envié. Isaías‬ ‭55:8-11‬

Los pensamientos son semillas, pero debemos tener cuidado de como se está sembrando; y esto está muy relacionado de acuerdo a la inspiración que tengamos (si es de Dios o el enemigo) que los pensamientos serán semillas de vida o semillas de muerte, semillas de alegría o semillas de tristeza, semillas de fe o semillas de incredulidad. Semillas que nos mantiene saludables o enfermos, exitosos, fracasados, temerosos, o llenos de amor.

¡Cuidado con la inspiración! porque si esta viene de pensamientos humanos, inspirados por la carne, o pensamientos inspirados por el enemigo totalmente en tinieblas o pensamientos directos del corazón De Dios, llenos de fe, luz y alto potencial de productividad al ciento por uno.

Cuando se reciben pensamientos debemos analizar si queremos seguir meditando en ellos, y de dónde viene la fuente que los produce; porque la meditación ayuda a que el Espíritu Santo barbeche y quite todo aquello que puede robar un buen pensamiento del corazón De Dios, y al mismo tiempo, fertiliza la tierra a través de la lluvia y la nieve; pues su voz es como estruendo de muchas aguas, que en medio de su presencia es poderoso manantial que trae riqueza a la tierra a través de su visitación. (Sal 65:9-13)

Entonces aquí vemos como la semilla debe ser sembrada en tierra bien tratada por el Señor, y esa tierra, es nuestro corazón El cual debe entrar a un proceso de germinación, crecimiento, madurez, y fructificación de la semilla, para que a través de la fe, pueda disfrutar la gran cosecha de bendiciones en todo sentido.

Jesús es la semilla divina
que El planto en nuestro corazón desde que le recibimos, El mismo es el labrador que cuidará que esa semilla traiga el más extraordinario fruto.

Es tiempo de que te dejes llevar por un proceso mediante el cual el Padre nos enseñe a rechazar todo pensamiento y todo camino que no vaya acorde al propósito y la visión que él tiene para nosotros. ¡Es tiempo de conquista a través de los mejores pensamientos! … Los pensamientos de Papá Dios en ti.

OREMOS Gracias Padre por entregarnos la capacidad de pensar y caminar siempre en triunfo contigo. Sacudo de mi vida lo que lo impida. Declaro en oración que la mano de tu gracia está en mi vida, en el nombre de Jesús, Amén. #Devocional_oficialCCM